viernes, 21 de diciembre de 2012

El caos, la perfección y Papa Noel

Anbotopeko 109  Parque Bilbao 45
Me resulta harto complicado explicar semejante paliza; sin duda la mayor en el club. Ni tan siquiera aquel primer partido, hace unas temporadas, del Parque de 2ª contra Agustinos acabó con tal masacre. Se me hace duro siquiera recordar algunos aspectos del juego, del nuestro, tan sonrojantes. No es fácil olvidar como ante un equipo local como éste, procuramos oponer cada vez mayores dosis de mediocridad.
El previo ya fue de por sí poco prometedor. Estábamos pocos, siete en concreto, lo que ya era un handicap preocupante. Y nuestra entrada al pabellón, tras encontrar por fin la puerta, tampoco daba una imagen de 'equipo sólido' precisamente.
Sin embargo, y pese a los temores generales, comenzamos el primer cuarto compitiendo. Mikel derrochaba intensidad y los demás jugadores acompañaban bien. Tras 10 minutos, sólo perdíamos de 10. Y comenzamos a creer...
Creímos, quizá, que podíamos hacer más que competir aquella tarde. Y seguimos corriendo en ataque, pretendimos continuar al ritmo de Anbotopeko, y ello fue el comienzo del suicidio.
En cualquier caso, al descanso perdíamos de 24 de diferencia, lo que nos hacía ser optimistas, creer que la paliza no sería tal, que con tan sólo siete jugadores, saldríamos de allí con una derrota digna.
Pues no. La dignidad se marchó del pabellón, acompañada del optimismo. Se quedaron, caprichosamente, la apatía, la vagancia, la anarquía... Y el resultado fue de 20 abajo en el tercer cuarto, y de otros 20 de diferencia en el último, donde encajamos la vergonzosa cantidad de 35 puntos.
61 puntos encajados en la segunda parte se me antojan humillantes; la cantidad de pérdidas de balón en tan sólo un pase, inexcusables; los ataques anárquicos, lamentables. Sin embargo, y pese a todo, algo sí hicimos bien, es más, perfecto. Paradójico fue que el día de los récord negativos, se batiera el récord del club en porcentaje de tiros libres en un partido, 100%.

Continuando la tradición, fue premiado el MVP de este último partido del año. En un encuentro así resulta difícil elegir a alguien destacado, mas por su constancia en los cuatro cuartos en buscar situaciones ventajosas, en procurar ataques con sentido, y en su defensa, es Manu el ganador del Papa Noel de chocolate, que le fue entregado días después en un entrenamiento.


Otros ganadores de esta entrañable distinción fueron: en el 2005, Hugo; en el 2006, Patxi; en el 2007 y 2008, Manu; en el 2009, Iñigo; en el 2010, Gontzal; y en el 2011, Txemi en el equipo de 1ª y Hurtado en el de 2ª. En principio eran los aficionados quienes elegían al premiado, siendo desde el 2010 el entrenador el encargado de hacerlo.

sábado, 15 de diciembre de 2012

Perdiendo entre amigos

Bidegintza 71  Parque Bilbao 52
Nunca una derrota fue tan bien consolada como ésta. Aunque también, pocas veces resultó tan públicamente vergonzosa. Jugar un partido con tantos amigos en las gradas causó tal dualidad: el consuelo y la vergüenza.
En Zalla se encontraban Jose, uno de los mejores que han pasado por el club, con su familia, Iban, uno de nuestros exentrenadores, al igual que Jon como entrenador del equipo local. Y más amigos en la grada dispuestos a presenciar el partido en que Bidegintza recogió los frutos de algo llamado entrenamiento. Tres días semanales entrenando, con ritmo, con un entrenador con cabeza, no contaban con su lógica transferencia en la clasificación, donde no habían ganado aún un partido.
Y tuvo que ser contra nosotros, contra un equipo que hoy tampoco ofreció buen nivel, que no defendió situaciones que no representaban tan alto grado de complejidad, que no atacó con inteligencia y sí más bien con cierta vagancia en determinadas situaciones que planteaba Bidegintza. Un equipo en el que no aportaron todos, a diferencia de lo ocurrido en la victoria anterior en Sopelana. Un equipo que no se sobrepuso a los 15 puntos de desventaja con que llegamos al descanso.
Al finalizar el partido sentí cierta vergüenza por la imagen que habíamos podido dar a toda esa gente en la grada, pero especialmente por lo que vieron nuestros amigos. Al menos me quedó el consuelo de que la victoria se la había llevado otro amigo.
 

sábado, 1 de diciembre de 2012

Cuando la lógica se tomó la tarde libre (2)

Ugeraga Saski 33  Parque Bilbao 73
Pero no se complicó. Aunque podíamos haber jugado mejor en esta segunda parte, aunque podíamos haber aprovechado mejor los minutos, en el campo y desde el banquillo. Aunque podíamos haber intentado aprender, finalmente los siguientes dos cuartos resultaron más 'normales'. Es decir, en el tercer período seguimos anotando, pero también Ugeraga encestó algo más. Y en el último, un empate a 8 clarifica lo que fue el juego de ambos equipos.
Al final, una ventaja bastante considerable, como hacía tiempo que no conseguíamos en este club, que sin embargo nadie se esperaba, y que muchos no entendían, preguntándose por qué había sucedido. Las respuestas se encontraban allí mismo, mas no había que buscarlas en la lógica, ya que ésta no estaba presente; se había tomado la tarde libre.
 
World in union
 

Cuando la lógica se tomó la tarde libre (1)

Ugeraga Saski 33  Parque Bilbao 73
Hoy estaremos pocos del equipo en Urko, porque entre lesionados y demás historias cuento que tendremos a seis jugadores disponibles tan solo. Mas no es esto lo que más me preocupa; temo más a la Lógica. Es ella la que me dice que tenemos unos cuantos aspectos en contra, la que me sugiere que le apueste una palmera a Iker, el de Ugeraga, a que vamos a perder; o sea, apostar contra mi equipo en esta ocasión me parece una buena opción de conseguir de gratis una palmera de chocolate. Sin embargo, una vez más (y ya van...) Iker me gana la apuesta. Porque ganamos, y porque además lo hacemos de una manera impensable, obviando a esa señora cerebral, que en ocasiones resulta tan desconcertante en baloncesto, como es la lógica.
Teníamos en contra, en primer lugar, la cantidad de jugadores, 6 (7 contando a Ander que estuvo en el banquillo lesionado) por nuestra parte, aunque al descanso llegó uno más, Adiran. También estaba el problema de jugar en campo contrario. Así mismo, partíamos en desventaja respecto a los entrenadores, contando Ugeraga con un buen míster. Y se me ocurrió que la cantidad de altura del equipo local también nos podía perjudicar. En definitiva, la dichosa lógica no me daba muchas opciones para creer en la victoria.
Y aún así salimos a competir, y vaya si lo hicimos. Nuestra desventaja numérica dictaminó el tipo de defensa con el que comenzamos, que no era el previsto a priori. Y de esta manera, comenzando en la defensa, y finalizando en ataques más o menos razonables, fuimos abriendo cierta ventaja en el tanteo. Aquí también nos vino bien que la lógica se fuera a dar un paseo, puesto que nuestros ataques se encontraban ciertos 'regalos' defensivos del rival que no esperaba. Con todo, llegamos al final del primer cuarto con 15 puntos de ventaja.
Al empezar el segundo período esperaba que Ugeraga cambiara, que el partido se igualara; sin embargo, sucedió más bien lo contrario, porque con un parcial de 0-14 tras siete minutos de juego, la diferencia se disparaba hasta casi los 30 puntos. Y como no me fiaba ni un pelo del equipo local, yo aún pensaba que se nos podría complicar el partido...